Las autoridades Envigadeñas se encuentran investigando un preocupante episodio de inseguridad que ocurrió este fin de semana cerca al Parque Ecológico El Salado, en la zona rural del Vallano en Envigado, donde siete personas fueron víctimas de un secuestro, robo y tortura a manos de tres sujetos armados que se presentaron como miembros de la Oficina de Envigado.
Según una de las víctimas, el grupo estaba disfrutando de un día en la naturaleza, haciendo senderismo y registro fotográfico cuando fueron sorprendidos por los delincuentes. Junto a ellos, también había dos ciudadanos extranjeros, quienes también fueron amenazados durante el angustiante suceso.
Los delincuentes exigieron a las víctimas que entregaran sus objetos de valor, incluyendo teléfonos y tarjetas de crédito. Además, se vieron obligados a revelar las contraseñas de sus cuentas bancarias, permitiendo que los criminales vaciaran sus cuentas mediante transferencias.
La tortura psicológica y física se prolongó durante ocho largas horas, mientras los secuestradores mantenían a las víctimas en la montaña, cruzando ríos y ocultándose para evitar ser vistos. Durante este tiempo, los delincuentes se comunicaron con una mujer, probablemente coordinando su huida.
Finalmente, los secuestrados fueron liberados a escasos metros de la carretera principal, dejándolos en estado de shock tras la traumática experiencia. Las pérdidas materiales en la tecnología robada, superan los 15 millones de pesos, esto sin tener en cuenta lo hurtado por transferencias bancarias.
Las autoridades ya cuentan con pistas sobre los sospechosos y trabajan arduamente para esclarecer el caso y llevar a los responsables ante la justicia. Al parecer se trata de 2 ciudadanos extranjeros (Venezolanos) y un Colombiano, las autoridades ya tienen pistas sobre ellos.
Este perturbador incidente ha encendido las alarmas sobre la creciente inseguridad en el Valle de Aburrá, generando preocupación en la comunidad y poniendo de manifiesto la necesidad de fortalecer las medidas de seguridad en áreas recreativas y naturales.
Las víctimas y sus familias claman por una mayor protección y vigilancia en estos espacios públicos para evitar que hechos tan traumáticos vuelvan a repetirse. La solidaridad y el apoyo hacia las personas afectadas se han hecho presentes en la comunidad, que espera que las autoridades tomen acciones contundentes para garantizar la seguridad de todos los ciudadanos.